EL NUEVO MANDATARIO COLOMBIANO, ANTE UNA PATATA CALIENTE

Colombia y Venezuela juegan con fuego en vísperas de la marcha de Uribe.

Colombia y Venezuela juegan con fuego en vísperas de la marcha de Uribe

El presidente venezolano Hugo Chávez (Reuters)

@Carlos Camino.- 25/07/2010

El presidente venezolano Hugo Chávez ha entrado en un nuevo episodio de tensión en sus ya agrios tratos con Colombia. Después de la ruptura de relaciones diplomáticas de este jueves, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana declaró este sábado que estaría en disposición de dar “una respuesta contundente” a cualquier ataque en suelo nacional.

Mientras que Álvaro Uribe da sus últimos coletazos al frente de Colombia, su sucesor en el cargo de presidente, Juan Manuel Santos, tendrá que hacer frente a la recomposición del trato con la República Bolivariana. El pasado jueves, la crisis entró en su fase más tensa, cuando el mandatario saliente denunció ante la Organización de Estados Americanos (OEA) la existencia de bases de la guerrilla de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) en territorio venezolano, provocando que Chávez rompiese las relaciones diplomáticas.

“La situación es imprevisible”, afirma a este diario Emmanuele Schibotto, coordinador de la web de Relaciones Internacionales Equilibri.net. “Chávez es una figura imprevisible, tal y como ha demostrado varias veces en pasado”, afirma. “Durante la crisis con Ecuador, mucha gente pensaba que acabaría estallando, debido a que estaba haciendo fuertes declaraciones, pero, finalmente, se resolvió relativamente rápido”.

Uribe, que dejará el cargo el 7 de agosto, sigue en sus trece. No solamente mantendrá la denuncia ante la OEA, sino que también interpondrá otra ante el Tribunal Penal Internacional por “crímenes de guerra y de lesa humanidad”, tras acusar a Venezuela de acoger en su territorio a guerrilleros de las FARC.

Santos, por su parte, ha evitado apoyar las denuncias de Uribe, por lo que, según Schibotto, se podría alcanzar una nueva fase de relaciones internacionales tras la toma de posesión del presidente electo. “Puede que Chávez use esta estrategia porque Uribe se va y quiere dejarle las cosas claras a su sucesor”.

De esta manera, el director del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad Central de Venezuela, Ángel Álvarez, señaló a la BBC, que descartaba que se desencadenase un conflicto y que ambas partes intentarían sacar provecho político sin que la sangre llegase al río. Venezuela celebrará el próximo 26 de septiembre comicios para elegir una nueva Asamblea Nacional, y un conflicto bélico “sería una debacle” en este contexto.

Mediación internacional

Por su parte, la maquinaria diplomática latinoamericana se puso en marcha para evitar males mayores a raíz de esta crisis. De esta manera, el presidente brasileño, Lula da Silva, anunció que mantendría conversaciones con Juan Manuel Santos para buscar una salida a la confrontación.

“Lo que a mí me extraña es que faltan muy pocos días para que el compañero Uribe deje la presidencia de Colombia”, indicó Lula a la prensa. “El nuevo presidente ha dado señales claras, incluso con los ministros que escogió, de que quiere construir la paz”, concluyó.

De la misma manera, desde Argentina, el ex jefe de Estado y actual secretario de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), Néstor Kirchner, se reunirá con ambas partes por separado.

Kirchner pondrá rumbo a Caracas el próximo 5 de agosto, donde mantendrá una entrevista con Chávez, para trasladarse a Bogotá y asistir a la toma de posesión de Santos dos días más tarde. Según la agencia Telam, el secretario de UNASUR, mantuvo el viernes y el sábado, conversaciones telefónicas con los principales mandatarios latinoamericanos “para resolver rápidamente la grave situación que envuelve a los dos países”.

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